Internacionalizar una empresa puede ser un paso decisivo en la obtención de nuevos clientes. Si bien este proceso suele ser a medio-largo plazo, resulta importante tener en cuenta las oportunidades que ofrecen los mercados internacionales para expandir cualquier proyecto.
No obstante, la competencia entre negocios es mayor. Por este motivo, conviene que las pequeñas y medianas empresas conozcan a la perfección el funcionamiento de este terreno.
Internacionalizar una empresa: ¿en qué consiste?
Expandir una empresa en el mercado internacional es el proceso a través del que cual se emplean de forma estratégica los recursos de los que dispone la organización y se usan para aprovechar las oportunidades que surgen en otros mercados. Entender cómo funciona el mercado internacional, cuáles son los riesgos y cuáles las oportunidades son algunos de los aspectos que debe tener en cuenta la empresa.
Esta deslocalización e interconexión continúa ganando adeptos, especialmente entre las pymes, debido a los beneficios que aporta.
¿Qué beneficios aporta la internacionalización?
Existen numerosas ventajas de internacionalizar una empresa. Estas son algunas de las más destacadas.
Aumento de clientes
Uno de los aspectos más relevantes al internacionalizar una empresa es el crecimiento de clientes potenciales, es decir, acceder al mercado extranjero facilita el contacto con nuevos usuarios y presentar productos y servicios únicos. Por ende, puede darse un aumento de los ingresos.
Acceso a nuevas tecnologías
No solo son muchos los gobiernos que ofrecen incentivos a los negocios que deciden invertir en su región, sino que la internacionalización ofrece la oportunidad de conocer a valiosos inversores extranjeros. De este modo, aumentan las posibilidades de disponer de tecnologías propias del sector, desconocidas para la empresa hasta el momento.
Competitividad y nuevos talentos
Por una parte, las organizaciones también podrán adentrarse en un mercado donde aún no ha accedido la competencia y dar a conocer sus servicios o productos. Ello conlleva hacer frente a los negocios locales. En ambos casos, la organización se verá impulsada a mejorar su propuesta.
Además, otra de las ventajas de internacionalizar una empresa es el contacto con talento experto y comprometido.
Mejora en la gestión de riesgos
Por último, expandir el negocio a nivel internacional y no depender de un mercado único, no solo posibilita una mayor rentabilidad, sino que también aporta una mayor seguridad financiera.
Pasos para internacionalizar una empresa
El proceso de expandir una empresa demanda ciertos requerimientos. Veamos cuáles son algunos de los pasos más importantes.
Identificar la capacidad para exportar
Internacionalizar una empresa implica disponibilidad de recursos suficientes. De lo contrario, la actividad exportadora no solo podría dilatarse en el tiempo, sino fracasar. Por esta razón, conviene evaluar cuáles son los recursos que la empresa requerirá para exportar y, así mismo, modificar la cultura de la empresa con el objetivo de adaptarse a las nuevas demandas.
Elegir el mercado objetivo
Para escoger el mercado ideal para cada empresa, producto y servicio, se deberá realizar un estudio previo. Para ello, una opción adecuada es recurrir a fuentes fiables, como el ICEX, para hacer una lista comparativa entre países y las características económicas de cada uno de ellos.
Adaptar los productos o servicios
Cada país cuenta con sus propias normativas para la importación de productos, especialmente acerca de la seguridad en los procesos de producción. De este modo, los elementos que se deben tener en cuenta varían, desde homologaciones y certificaciones hasta cambios de idiomas en los embalajes, etiquetas e instrucciones.
Identificar el canal de entrada adecuado
Las opciones para acceder al mercado internacional comprenden la inversión, la exportación directa o indirecta o, la distribución, entre otros aspectos. Antes de llevar a cabo la internacionalización de la empresa es recomendable establecer el método que se quiere seguir.
Definir los objetivos
Fijar unos objetivos realistas y realizables, acordes a los recursos propios de la empresa, forma parte del plan de estrategia comercial. No obstante, cumplir con estas metas suele tomar su tiempo, ya que en las primeras fases del proyecto el retorno de la inversión puede no ser positivo.
Implementar una estrategia de marketing internacional
Contar con una página web en el idioma del país de destino y traducir la documentación relativa a los servicios o productos es uno de los pasos más relevantes en el proceso de internacionalizar una empresa. La localización puede marcar la diferencia.
Internacionalizar una empresa es una decisión trascendental debido a la cantidad de retos que el negocio puede encontrar en el camino. No obstante, las barreras para acceder al mercado internacional son cada vez menores. Por esto, el presente puede ser el momento idóneo para dar el paso.
