Un canal de venta online es un sitio web o una plataforma a través de la cual se ofrecen servicios o productos a los clientes.
Elegir el canal de venta adecuado permitirá que las pymes tengan la mayor rentabilidad posible. En la actualidad, existen varias opciones que ayudan a que las pequeñas y medianas empresas se den a conocer a través de Internet. Debido al auge del comercio electrónico en los últimos años, interesa conocer las diferentes alternativas a nuestro alcance.
Canales online de venta para pymes
Uno de los primeros canales de venta online puede ser una página en la que se presente un producto con sus correspondientes ventajas y beneficios. Conviene que las imágenes sean atractivas, de alta calidad y muy visuales, de tal manera que los clientes puedan observar todas las características del objeto. Asimismo, se puede incluir algún vídeo.
Otro canal de venta para pymes es el e-commerce o comercio electrónico. A través de una tienda online que puede funcionar al igual que una física, o incluso del Marketplace o Dropshipping, se ponen productos a la venta que pasarán por unos procesos (compra, localización en el almacén, transporte) antes de llegar al consumidor final.
Un tercer canal de venta pueden ser las redes sociales. En Facebook, por ejemplo, los seguidores realizan compras sin tener que acceder a la página web o tienda online. De esta forma, las redes se convierten en métodos de venta directa para pymes y les ayudan a obtener mayores beneficios de una manera más accesible para el pequeño comercio.
El canal más adecuado para cada pyme
Para determinar cuál es el canal de venta más adecuado para cada pyme es importante analizar las ventajas y desventajas que pueda tener cada uno. Por ejemplo, si se decide tener una tienda online habrá que gestionar el stock, controlar cada proceso hasta que el producto llega al consumidor final y también trabajar el posicionamiento para que la tienda pueda competir en Internet, entre otras muchas tareas.
En cambio, optar por el Marketplace puede ahorrar el trabajo del posicionamiento, ya que es posible aprovechar el reconocimiento de una tienda online como Amazon. En el caso del Dropshipping, no habrá que ocuparse del stock o de tener un almacén, de eso se encargará un mayorista.
Sin embargo, en esta opción se pierde el control de los procesos, lo que puede llevar a mermar la reputación de la marca y disminuye el beneficio.
Poner sobre una balanza los pros y contras de cada método del canal de venta ayudará a adoptar las decisiones que se ajusten a las características y los objetivos del negocio. La ventaja que comparten todas estas opciones es la oportunidad que ofrece el entorno digital para llegar a más personas, la disminución de las barreras geográficas y la respuesta a una demanda creciente de los consumidores.
Los canales de venta evolucionan y siguen apareciendo nuevas alternativas. Las redes sociales son algunos de los más recientes, pero también podríamos incluir a Google Shop. El objetivo es siempre adaptarse a las necesidades que puedan tener las pymes y ofrecerles soluciones para que vendan más de forma rápida y sencilla.