Cuando estamos decidiendo emprender el camino de la creación de una empresa, debemos considerar que la empresa debe funcionar con al menos un administrador. La figura del administrador tiene diferentes funciones y responsabilidades según el tipo de administrador que estemos pensando.
En este artículo vamos a analizar las principales características y funciones que realiza un administrador solidario en una empresa y cómo se involucra dentro de la sociedad limitada.
Funciones de una administrador solidario
La figura del administrador solidario está regulada en la Ley 2/1995, de 23 de marzo, de Sociedades de Responsabilidad Limitada. Dicha ley indica que el administrador solidario es una persona jurídica que representa y gestiona una sociedad limitada.
Las funciones que puede desempeñar el administrador solidario son las siguientes:
- Representación de la empresa en su relación con terceros.
- La toma de decisiones relacionadas con la gestión y el funcionamiento de la empresa.
- La ejecución de las decisiones de la empresa así como otorgar poderes a terceras personas para la representación de la empresa.
- Nombramiento de administradores dentro de la empresa.
- Realizar las funciones de contratación y despido del personal de la empresa.
- Proceder a la destitución del personal de la empresa en caso que no hayan cumplido con sus funciones.
El administrador solidario es un cargo con mucho poder dentro de una empresa, ya que puede llevar a cabo una serie de funciones sin necesidad de pedir permiso a la Junta de socios quienes son los encargados de nombrar al administrador solidario.
Existe una limitación para el administrador solidario dentro de sus funciones, es la del cumplimiento de los estatutos de la empresa en todo momento. Por tanto, todos los socios de la empresa deben tener claro que el administrador solidario les está representando dentro de la empresa.
El administrador solidario de una sociedad limitada
Como hemos visto, el administrador solidario tiene gran responsabilidad dentro de la empresa y en la sociedad limitada es fundamental esta figura, ya que la inversión de los socios está limitada a las aportaciones en capital.
Por otra parte, en las sociedades anónimas la elección de administrador solidario se debe hacer con mucho cuidado, ya que esta figura puede vender las acciones de la empresa sin tener en cuenta la aprobación de las Junta de Accionistas, por tanto, la figura del administrador solidario tiene más sentido en la sociedad limitada.
Por otra parte, no necesariamente el administrador solidario debe ser autónomo. En el caso, que sea administrador y a la vez socio, el administrador solidario está obligado a darse de alta como autónomo, ya que está realizando funciones de dirección dentro de la empresa.
Pero si el administrador no es socio de la empresa, pueda pasar los siguientes casos:
- Trabajador por cuenta ajena: Es el caso que el administrador solidario es asalariado de la empresa pero no tiene participaciones de la misma y no está obligado a darse de alta como autónomo, aunque sea administrador.
- Trabajador por cuenta propia: Es el caso que el administrador solidario factura a la empresa por las funciones que está realizando y, por tanto, debe estar dado de alta como autónomo.
¿Cuántos administradores solidarios puede haber en una empresa?
Dentro de una sociedad puede haber dos o más administradores solidarios, y es una de las situaciones que más se repite dentro de las empresa, sobre todo en aquellas empresas que hay dos socios con el 50% de participaciones.
La figura de administradores solidarios es una de las alternativas más utilizadas en las pequeñas sociedades limitadas, ya que se gana agilidad dentro de los procedimientos que se realizan dentro de la empresa.
Aunque, en este tipo de empresa surge otra figura, dicha figura se denomina administradores mancomunados. El administrador mancomunado es la figura opuesta al administrador solidario, ya que necesita la firma de la junta de socios para poder actuar.